Veneración y afecto le profesábamos muchos de los mindonienses, hubiésemos sido o no sus alumnos, a Doña Remedios, que se le consideraba una maestra de buen talento, mucha aplicación y sólidas virtudes profesorales de la educación, con sinceras pruebas de singular afecto hacia los que entonces fueron sus alumnos y hacia todos sus vecinos.
Se afanaba Doña Remedios Muruais Carballosa por saludar siempre con cariño a sus amigos y a sus vecinos. Últimamente le costaba identificar a quién se cruzaba con ella en la calle, pero miraba hacia atrás por si era persona conocida y no le había cumplimentado.
La ejemplaridad de la vida de maestra de Doña Remedios llegaba hasta la calle, hasta cualquier lugar que te encontraras con ella, y aprovechaba para entregarte sus buenos consejos que a algunos hasta les producía un gran alivio. La muerte de una persona de sus cualidades siempre impresiona y aviva el recuerdo de ella, por muy otoñal que fuere, y lo primero que se nos viene a la cabeza es que Doña Remedios por su sinceridad, por su llaneza en el trato y por su actividad incasable, es que debe tener y tenía por parte del pueblo un querer especial que le hará ser inolvidable y recordada con simpatías. Yo, sin haber sido alumno de ella, le apreciaba de veras y pediré por su alma.
Sé lo duro que es perder a una madre y si te deja sólo quizás sea más, por ello deseo y pido fuerzas para ti y piensa que la vida, aunque, a veces, parezca injusta, sigue, amigo José Mª Palacios Muruais, y no queda más que encomendarla, y así lo hago, a quien le puede conceder, por sus méritos en la tierra, el premio que reserva para los escogidos, y tú recibe mis sentimientos y condolencias públicas por su irremediable pérdida, que extiendo a la demás familia.
Este es mi sencillo y humilde homenaje a Doña Remedios, que nos dejó para siempre el día 29 de setiembre de 2.010 y a quien le deseo que en paz descanse. Así lo opino.
La ejemplaridad de la vida de maestra de Doña Remedios llegaba hasta la calle, hasta cualquier lugar que te encontraras con ella, y aprovechaba para entregarte sus buenos consejos que a algunos hasta les producía un gran alivio. La muerte de una persona de sus cualidades siempre impresiona y aviva el recuerdo de ella, por muy otoñal que fuere, y lo primero que se nos viene a la cabeza es que Doña Remedios por su sinceridad, por su llaneza en el trato y por su actividad incasable, es que debe tener y tenía por parte del pueblo un querer especial que le hará ser inolvidable y recordada con simpatías. Yo, sin haber sido alumno de ella, le apreciaba de veras y pediré por su alma.
Sé lo duro que es perder a una madre y si te deja sólo quizás sea más, por ello deseo y pido fuerzas para ti y piensa que la vida, aunque, a veces, parezca injusta, sigue, amigo José Mª Palacios Muruais, y no queda más que encomendarla, y así lo hago, a quien le puede conceder, por sus méritos en la tierra, el premio que reserva para los escogidos, y tú recibe mis sentimientos y condolencias públicas por su irremediable pérdida, que extiendo a la demás familia.
Este es mi sencillo y humilde homenaje a Doña Remedios, que nos dejó para siempre el día 29 de setiembre de 2.010 y a quien le deseo que en paz descanse. Así lo opino.
LORENZO ARES ROBLES - Mondoñedo
NOTA: LAS OPINIONES VERTIDAS EN ESTE ESPACIO SON DE EXCLUSIVA RESPONSABILIDAD DE SUS AUTORES Y NO REPRESENTAN NECESARIAMENTE LA OPINIÓN DEL EDITOR.
Para publicar un artículo firmado en esta sección escribir a:Esta dirección de correo electrónico está siendo protegida contra los robots de spam. Necesita tener JavaScript habilitado para poder verlo.
NOTA: LAS OPINIONES VERTIDAS EN ESTE ESPACIO SON DE EXCLUSIVA RESPONSABILIDAD DE SUS AUTORES Y NO REPRESENTAN NECESARIAMENTE LA OPINIÓN DEL EDITOR.
Para publicar un artículo firmado en esta sección escribir a: