Los alrededores de Mondoñedo están llenos de sencillas capillas desparramadas por entre los caseríos. Las fueron fundando presbíteros o personas piadosas y para ello dejaban haciendas y establecían capellanías. En el siglo XIX, con las leyes desamortizadoras desaparecieron estas capellanías, pero la devoción popular ha continuado sosteniendo estas pequeñas edificaciones de culto, en muchas de las cuales existen curiosos retablos o esculturas notables.
En el barrio de Cesuras, parroquia de Nuestra Señora de los Remedios, se encuentra erigida una edificación religiosa de pequeñas dimensiones conocida con el nombre de capilla de Santa Margarita. La citada edificación fue construida sobre un pequeño montículo que forma el terreno, cercana al regato que desciende desde el abundante manantial de Mouros, a la orilla de un camino de carro que comunica varias viviendas del lugar y tierras de labor y muy próxima a otro regato de aguas torrenciales que desciende de las faldas de los montes de A Pena da Roca. La capilla presenta una planta rectangular de 10,15 metros de fondo por 6,40 de ancho, con muros de mampostería, en los que hay unas pequeñas ventanas para la entrada de luz y techumbre de madera a dos aguas, cubierta con pizarra. En su frontal y sobre la puerta de entrada tiene una pequeña espadaña construida toda de cantería, con dos vanos para las campanas.
Gracias a una anotación escrita de su puño y letra por D, Eduardo Lence Santar, antiguo cronista de Mondoñedo, conocemos los datos que a continuación comentamos: “Antonio López y su esposa Luisa Díaz, moradores en el lugar de Cesuras, en su casa, el 20 de noviembre de 1698 otorgan testamento abierto a fe de Francisco de Legaspe. Mandaron que los entierren con hábito de San Francisco delante de Nuestra Señora la Grande y en las sepulturas donde están sepultados nuestros antepasados. Mandaron celebrar cada uno su misa en las capillas de la Virgen de los Remedios y otras dos en la Virgen del Camino de Zoñan, quienes son cofrades, y otra más en la ermita de Santa Margarita. Luisa funda una misa de aniversario perpetuo sobre la heredad de Grandal, en Cesuras, que se celebrara en dicha capilla de Santa Margarita de la que es patrono Carlos López, su hijo, llamado por la fundación que de ella hizo el Licenciado Francisco Bouso, mi hermano, capellán que fue de dicha catedral Iglesia y el día de Santa Luisa, Santa de mi nombre y ofrenda de limosna tres reales y medio. Antonio López fundó también otra misa en la citada ermita sobre media fanega de heredad del lugar de Oseira, la cual misa se celebrará el día de San Antonio, o las vísperas”(1).
La ermita de Santa Margarita fue visitada en el mes de febrero del año 1700 por el Obispo de Mondoñedo D. Manuel Francisco Navarrete Ladrón de Guevara.
Conocedores de los datos anteriormente citados visitamos en su despacho al archivero catedralicio D. Enrique Cal Pardo, que nos recibió amablemente como siempre. Le comentamos los datos que poseíamos y el modo en que habiamos conseguido. A continuación buscó en el archivo catedralicio la documentación existente sobre la visita que efectuó el Obispo D. Carlos Riomol y Quiroga el 30 de marzo del año 1758 a las diferentes capillas y oratorios existentes en Mondoñedo y sus alrededores. Por medio de estos documentos sabemos que era patrono de la ermita en el año 1758 Juan López das Goás, vecino de Cesuras.
El Sr. Obispo con motivo de la visita del año 1758, entre otras cosas, pidió al patrono que presentara la documentación de la citada ermita y le mandó encalarla por dentro y por fuera y lastrar todo el suelo. Según la documentación aportada por el patrono, la ermita fue edificada a su costa por el presbítero y capellán de la catedral D. Juan Bouso Díaz en el año 1671, para lo que hipotecó una pieza de heredad de una hanega de superficie sita en el lugar de Cesuras, llamado “Chousa de Xión”.
En el interior de esta ermita podemos contemplar las imágenes de Santa Margarita, la Purísima Concepción, San Antonio, la Virgen del Carmen, San Ramón, San Andrés, San Roque y otras de menor tamaño conocidas vulgarmente como “de poner el Santo”.
En el interior de la edificación, al realizar unas obras de reparación de la techumbre y pintado de sus paredes interiores aparecieron en los muros laterales unas curiosas pinturas. En una de ellas aparece la imagen de Nuestra Señora de los Remedios y en la otra un jarrón con flores. Siendo cura párroco de Los Remedios D. Ricardo Pena mandó en los años ochenta del pasado siglo protegerlas de la luz con unos paños.
En su pequeña espadaña se encuentra colocada solamente una campana que fue fundida en el año 1.904 por D. José Antonio Blanco López, fundidor mindoniense que tenía ubicado su taller en las proximidades del Campo de la Feria de Mondoñedo.
Cada 22 de julio se celebra la festividad de Santa Margarita, aunque por una serie de motivos los vecinos de Cesuras le hacen coincidir con el día festivo más inmediato al señalado.
(1) Archivo del Ayuntamiento de Mondoñedo, carpeta 967, actas de 1861 a 1870.