El buen tiempo acompañó y fueron muchos los turistas que se  
acercaron a nuestra ciudad para viajar en el tiempo y disfrutar de la 
XXII edición del Mercado  Medieval. Además de la degustación de torreznos, pan, cerveza y vino y de la demostración y venta de productos artesanales, se sucedieron los espectáculos de malabaristas, las exhibiciones de cetrería y la animación por las calles.
Las fotografías están en nuestra galería.
					