
El gol de los visitantes vino nada más empezar la segunda parte tras una intervención desafortunada del portero local Roberto.
Aunque en la primera mitad los locales merecieron el triunfo, se desinflaron un poco en la segunda con la llegada del gol del empate.
La expulsión, por dos tarjetas, de un jugador de A Pontenova hizo que el último cuarto de hora fuera un infructuoso monólogo local, sólo interrumpido por algunas salidas al contrataque de los visitantes bien resueltas por el central local Miguel, jugador muy acertado durante todo el encuentro.
El entrenador local sorprendió a la afición dejando de inicio en el banquillo al delantero más en forma, Borja, autor de dos hat trick en menos de quince días.